Mi propuesta educomunicativa

Una propuesta deTrueque solidario para jóvenes

Mi propuesta educomunicativa intenta llevar a los jóvenes el sentido del trueque, el cual está teniendo un inesperado resurgir, y el gran valor que puede llegar a tener en esta época tan marcada por la crisis económica. Es interesante el valor que le podemos dar a las experiencias y conocimientos de las personas que tenemos a nuestro alrededor para promover el desarrollo personal y grupal.

Tras llegar a proyectos tan interesantes como el de Heloísa Primavera en Argentina, que pudiera ser el precursor, y algunos otros proyectos más,  relevantes en España actualmente. Me gustaría, diseñar en esta línea un programa educomunicativo para tod@s l@s adolescentes de Bachillerato de Motril (Granada). Me centro en este grupo porque aproximadamente a este edad comienzan a utilizar las redes sociales de manera más constructiva y sus búsquedas contienen y conllevan un poco más de criticidad.

Consiste básicamente en  intercambiar actividades, experiencias, conocimientos… sin necesidad de utilizar el dinero. Por ejemplo: Una persona quiere aprender a bailar salsa, o a cantar rap, o a hacer malabares… hay otra que sabe bailar salsa, cantar rap o hacer malabares. Intercambian conocimientos, ya que seguro que la que quiere aprender a bailar tiene algo que enseñarle a la que le enseña a bailar…Una persona quiere practicar inglés, hay otra persona que es nativo y quiere practicar el español, intercambio perfecto…

Una persona quiere aprender a …, otra está dispuesta a enseñarlo, y viceversa…

Intercambian además de conocimientos, experiencias, relaciones interpersonales, diálogos, ideas,

La intención digital que conlleva es que: a través de la red vamos a exponer las ofertas y las demandas de est@s chic@s, para que exista comunicación y participación desde ell@s mism@s, sin mediación de los profesores ni de los agentes del proyecto. Se podría crear un grupo abierto en la red social que utilice la mayoría, y animar a los que aún no tengan una  cuenta, a pertenecer al menos al grupo del trueque. Para poder estar informado de las ofertas que se publiquen, por si alguna le interesase, y para estar dispuesto a enseñar lo que sepa.